La criada traviesa Charly Summer se divierte mientras limpia para su nuevo cliente, Kieran Lee. Después de un accidente en el que él la mira limpiamente y se corre por todo su culo, le devuelve el favor lamiendo a Charly hasta el éxtasis. Luego, los dos llevan la acción al dormitorio principal, donde todas esas burlas terminan en una sesión de sexo desagradable.